Luego de 17 años al frente de la Cooperativa Lechera de La Unión (Colun), una de las entidades de su tipo más exitosas del país, con casi 70 años de funcionamiento, Augusto Grob Fuchs decidió dar un paso al lado. Con una vida ligada a la agricultura y al rubro lechero, Grob es el presidente de Colun que por más años permaneció en el cargo. Y se desempeñó en un tiempo donde las relaciones entre la producción primaria y las industrias han sido tensas, con diferencias en los precios que pagan las procesadoras a los productores. Por ello, la cooperativa se ha transformado en un modelo a seguir para robustecer la alicaída producción primaria en el sur.
-¿Qué lo motivó a dejar la presidencia de Colun?
-Tras ocupar durante 17 años el cargo de presidente del Consejo de Administración, me pareció más que prudente dar un paso al costado para, por una parte, abrir el «tiraje a la chimenea» y brindar oportunidades de desarrollo a otros socios, capaces de ofrecer distintos aportes a la cooperativa. Y también entregar a nuestra comunidad de cooperados otros enfoques que continúen con la senda trazada por los socios fundadores hace ya casi 70 años, en directo beneficio de los agricultores que nos acompañan en este emprendimiento.
-¿Seguirá ligado a Colun? Si es así, ¿de qué forma lo hará?
-He dejado la presidencia del Consejo de Administración, pero fui elegido nuevamente como miembro de número del mismo consejo.
-¿Cuáles fueron los principales logros en el periodo como presidente de la cooperativa?
-Una de las principales características de la cooperativa Colun ha sido su constante y pausado desarrollo en la dimensión industrial, aunque también el crecimiento productivo, la ampliación de los mercados a los que accede, modernización y uso de tecnologías tanto en los procesos industriales y comerciales, como en los sociales. Esto último lo aplicamos en la formación de competencias de los trabajadores de nuestras plantas y a los socios cooperados en sus campos.
-¿Cuáles han sido los momentos más complicados que letoco vivir en Colun corno presidente?
-Creo que en la vida de una industria, de cualquier tipo, como en la de los seres humanos que actúan en ella, hay momentos de relativo relajo y momentos complejos que requieren esfuerzos mayores a los normales de todos sus miembros. No podría destacar unos sobre otros.
EN ARMONÍA
¿En qué pie está actualmente Colun, en un rubro donde hay controversia entre la industria y los productores?
-Afortunadamente, y no por casualidad, Colun, a punto de cumplir 70 años de existencia, sigue desarrollándose en armonía con sus cooperados. Se basa estrictamente en la filosofía cooperativa, que cree en la igualdad de los aportes de sus socios al bien común, siguiendo la regla de «un hombre-un voto». Distribuye equitativamente entre todos los cooperados los resultados de los esfuerzos realizados en la organización.
-¿Qué se proyecta para la cooperativa?
-Seguiremos aplicando nuestros mayores esfuerzos a la producción de los mejores y más naturales productos lácteos que podamos ofrecer al público consumidor, tanto en Chile como en el extranjero. Ello, acompañado de dedicación y compromiso, tanto de nuestros técnicos industriales como de los socios apicultores de Colun.
«GUERRA DE LA LECHE»
-¿Cómo vivieron la especie de «guerra de la leche» que se dio en las redes sociales el año pasado, donde grupos llamaban a dejar de preferir productos lácteos de otras marcas e invitaban a consu-mir sólo productos colun?
-La vimos como la reacción espontánea de un público que solidarizó con nosotros, porque consideró que la sana competencia entre empresas fue vulnerada.
-¿Cree que esto le hizo mal al rubro?
-Sin duda que, en cualquier actividad, hay reglas que es bueno respetar.
–Luego de tantos años encabezando la más importante procesadora de lácteos del país, ¿A qué se dedica ahora?
-A la agricultura y a la producción de leche en mi campo, aunque ahora con más disponibilidad de tiempo.
Fuente: Austral de Osorno
