La Cámara Alta aprobó dos proyectos de acuerdo en donde se hacen solicitudes al Presidente de la República, para las materias respectivas.
Con el primero de ellos se pide que se adopten las medidas necesarias para resguardar y fomentar la producción nacional de leche. La solicitud, argumentan los legisladores, considera que el mercado de la leche en Chile ha sufrido drásticos cambios en los últimos años. Un reflejo de ello es que nuestro país ha pasado – en apenas cuatro años- de ser un país exportador neto de leche a ser un país importador neto del referido producto.
En síntesis, Chile ha perdido el liderazgo que tenía como país productor de leche, pasando de ser un país exportador a uno importador del recurso. Lo anterior se debe a una baja en el número de productores nacionales, cabezas de ganado y hectáreas dedicadas a la producción de leche debido, entre otras razones, a los bajos precios y duras condiciones del mercado que hacen cada día más difícil mantenerse en el negocio de producción lechera.
Asimismo, el consumo nacional de leche por parte de los chilenos se ha mantenido relativamente estable en los últimos años, teniendo un consumo per cápita anual promedio de 150 litros en el 2017. En tal sentido, al no haber un incremento importante del consumo de leche en Chile, la creciente importación de leche producida en el extranjero viene a reemplazar y sustituir la producción nacional. Si bien no existen cifras oficiales del número actual de productores, es reconocido en la industria que en el año 2010 había en Chile cerca de 10.000 productores de leche, cifra que contrasta con la cantidad actual que se aproxima 6.000 productores, la cual sigue a la baja.
Las cifras expuestas son un claro reflejo de la compleja y dramática situación en que se encuentran en la actualidad los productores nacionales de leche. Por diversas razones, los precios de la leche están en niveles históricamente bajos, que hace muy difícil -especialmente a los pequeños y medianos productores- poder subsistir. Esto ha generado una baja en la producción nacional, lo cual amenaza, en caso de no tomarse medidas, con hacer desaparecer la industria.
Lo anterior, prosigue la argumentación, es un escenario que como país no podemos permitirnos, ya que, en primer lugar, Chile goza de ventajas comparativas y de excelentes condiciones para producir leche, especialmente en la zona centro-sur, siendo reconocida la calidad de nuestra leche a nivel internacional.
En segundo lugar, dicha industria contribuye considerablemente en la economía de las regiones de Los Lagos y Los Ríos, siendo una gran fuente de empleos tanto directos como indirectos.
Sumado a lo anterior, la desaparición de la industria lechera en Chile amenazaría directamente la seguridad alimentaria de nuestro país, ya que no parece conveniente depender en el futuro exclusivamente de la importación de leche en polvo y otros derivados, ya que éste es un alimento de vital importancia para la población, especialmente en los niños.
La medida fue presentada por los senadores Manuel José Ossandón, Isabel Allende, Carmen Gloria Aravena, Luz Ebensperger, Adriana Muñoz, Ximena Órdenes, Yasna Provoste, Ximena Rincón, Andrés Allamand, Pedro Araya, Carlos Bianchi, Francisco Chahuán, Juan Castro, José Durana, Alfonso De Urresti, Álvaro Elizalde, Rodrigo Galilea, Alejandro García Huidobro, Guido Girardi, Alejandro Guillier, Felipe Harboe, Francisco Huenchumilla, José Miguel Insulza, Juan Ignacio Latorre, Alejandro Navarro, Víctor Pérez Varela, Jorge Pizarro, Kenneth Pugh, Rafael Prohens, Jaime Quintana, David Sandoval y Jorge Soria.
Manipuladoras de alimento
Todos ellos solicitan al Presidente de la República que en el Proyecto de Ley de Presupuesto del Sector Público, para el año 2018, se incluya sin más trámite en la glosa pertinente de la Partida del Ministerio de Educación, a las manipuladoras de alimentos de las regiones de Arica y Parinacota, Tarapacá, Isla de Pascua, Juan Fernández, y Aysén, con contrato vigente, como beneficiarias del pago del mismo bono que perciben actualmente dichas trabajadoras en las regiones de Magallanes y Antártica Chilena, conforme a lo establecido en la Ley de Presupuestos del Sector Público, para este año 2018.
Actualmente este bono lo perciben las manipuladoras de alimentos con contrato vigente en la región de Magallanes y Antártica Chilena, sin que aún gocen de este beneficio las manipuladoras de alimentos, que se desempeñan en las otras zonas extremas, como las mencionadas.
El proyecto de acuerdo presentado por Francisco Chahuán, Luz Ebensperger, Adriana Muñoz, Ximena Órdenes, Ximena Rincón, Jacqueline Van Rysselberghe, Pedro Araya, Carlos Bianchi, Juan Castro, José Durana, Álvaro Elizalde, Rodrigo Galilea, Guido Girardi, Alejandro García Huidobro, José Miguel Insulza, Ricardo Lagos, Juan Ignacio Latorre, José Ossandón, Víctor Pérez, Rafael Prohens, Kenneth Pugh y David Sandoval.
Fuente: Mundo Agropecuario